Imaginame desnuda.
Imagina mi cuerpo lleno de marcas.
Vuelve a imaginarme desnuda.
Cierra tus ojos.
Imagina mi cuerpo desnudo iluminado con la luz de la noche.
Imaginame desnuda, transparente como mi alma.
Sólo... imaginame desnuda.
He de advertirte que no hablo de esa desnudez que sólo implica el roce de mi piel al viento frío. Si te digo que me imagines desnuda es porque quiero que me conozcas más, conocerme más allá del morbo aparente en tu expresión. Mi desnudez no sólo implica mi cuerpo enmarcando mi sexualidad. El día que puedas imaginarme desnuda y la imagen no sea precisamente de mi cuerpo he de entregarte no sólo mi pasión, te entregaría algo más valioso, Te daría todo mi universo de sensaciones, donde para ti habría una nueva forma de encuentro, sólo trata, trata de imaginarme desnuda, natural, libre como mis ideas, ligera y sin prisa
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