jueves, 26 de diciembre de 2013

Bienvenida

Tenía atravesada, como una espada, la vida hasta que llegaste tú,
y nuestras almas pudieron por fin encontrarse
y nuestros labios se conocieron,
y nuestros corazones palpitaron al mismo ritmo,
y nuestros sentidos supieron interpretar el presente como una joya,
cada segundo, cada minuto, pudimos percibir cuanta euforia cabía en un momento
porque me entiendes, y mi vida junto a ti cobra sentido
deja de ser tan gris, tan vacía
y porque te quiero, y me quieres
y sé que vamos los dos
caminando de la mano
con el corazón latiendo al mismo ritmo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario